Agencias de contenido: volverse sustentable sin perder la línea editorial

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A pesar de todos los avances que permiten la proliferación de nuevas voces y fuentes de información en Internet, los proyectos editoriales pasan por tiempos difíciles a la hora de generar ingresos para sostenerse.

Poner en punto a un medio lleva mucho trabajo y requiere de múltiples roles, no solo periodísticos, además de tiempo e inversión para desarrollar sus plataformas. En un artículo reciente, Naimid Cirelli, director de comunicación de SembraMedia, destacó algunas de las principales fuentes de ingresos de los medios digitales contemporáneos. Entre ellas, puso a las agencias de contenido entre las cinco más populares: ya sea por la cercanía en el tipo de tareas, el know-how y las herramientas necesarias, o por su rentabilidad en el ecosistema de comunicación y marketing, son muchos los medios digitales de América Latina que optan por crear agencias para incrementar sus ingresos.

Agencia Ocote nació en 2019, aunque hacía un año que trabajaban en su concepto: el medio de comunicación Ocote, donde hacen periodismo. El enfoque siempre fue feminista: todas las coordinaciones están a cargo de mujeres. La idea era que la agencia fuera una de las fuentes de financiamiento del medio de comunicación, que hasta el día de hoy se nutre de donantes internacionales. La empresa vende servicios, pero el porcentaje todavía es de entre el 5% y el 10% de los ingresos.

José Jasán Nieves es el editor jefe de El Toque, de Cuba; y Alejandra Gutiérrez Valdizán es la directora de Agencia Ocote, de Guatemala. En una conversación con IJNet en Español, ambos comentaron los desafíos para llevar adelante en estas agencias y  cómo mantener el trabajo editorial en sus medios.

En el caso de El Toque, su agencia de contenidos surgió durante la primera fase de la aceleradora Velocidad de ICFJ y SembraMedia. Durante ese proceso de aprendizaje resolvieron que su modelo de negocios sería diseñado alrededor de una agencia de servicios de comunicación. CATAO Studio surgió, entonces, para vender servicios principalmente a empresas de cubanos en el exterior.

Con un modelo similar, Agencia Ocote ofrece una variedad de servicios relacionados con el trabajo editorial, el diseño, la planificación y la formación en temas de comunicación. El plus que ofrece el equipo guatemalteco es el enfoque en las temáticas que toca: memoria, justicia y derechos humanos. “Muchas veces nos buscan por las temáticas del medio de comunicación”, explica Gutiérrez Valdizán.

Decisiones organizacionales

Ambas agencias tienen pocos años y, a pesar de haber desarrollado una cartera de clientes asidua, los ingresos que representan en total no superan el 10% en ninguno de los dos casos. Sin embargo, conllevan suficiente labor como para que se hayan tenido que tomar decisiones organizativas para garantizar que el trabajo de la agencia no altere el trabajo editorial. “El equipo que trabaja en la agencia o la empresa es diferente del medio de comunicación”, explica Gutiérrez Valdizán, de Ocote. “[En la agencia] hay tres personas trabajando a tiempo completo: la coordinadora de servicios, el coordinador creativo y un diseñador”. Además, cuentan con colaboradores recurrentes con los que trabajan tanto en la agencia como en el medio. De esta forma, el equipo preserva el tiempo de trabajo de cada miembro y define el rol que cumplen dentro de la estructura.

El caso de El Toque es diferente. Cada miembro del colectivo tiene un rol definido y presta funciones tanto para el medio como para los servicios de comunicación. Ya sea el equipo de diseñadores o de audiovisual produciendo piezas para clientes, los periodistas brindando servicios de redacción y traducción, o incluso la directora de finanzas dando capacitaciones para otros medios independientes. La única persona que no tiene doble función es la project manager, que es quien administra y organiza las decisiones para que evitar tensiones. “Siendo las mismas personas para todo, los tiempos son limitados. Por eso, con la project manager, lo primero que hacemos siempre es fijar urgencias”, dice Jasán nieves. Quien, qué, cómo y cuándo son cosas que se resuelven en base a las tareas pendientes, el tiempo disponible y los deadlines de la agencia y el medio.

Tanto Ocote como El Toque tocan temáticas que competen a sus sociedades y la región: política, derechos, migración, género, justicia y corrupción. Sus investigaciones ayudan a develar entramados de violencia sistémicos, visibilizan estrategias de organización política en sus comunidades y hacen red con aliados y aliadas por fuera de sus países. En ese sentido, el trabajo que hacen tiene una línea editorial muy clara y una audiencia con la que dialogan.

El Toque tiene a la transparencia como regla en su vínculo con los clientes. “Dejamos en claro nuestra línea editorial y que no está en discusión: no vamos a producir contenidos que se entrometan con nuestra línea editorial”, cuenta Jasán Nieves. Esta postura, lejos de perjudicarlos, los beneficia: los esfuerzos, conocimientos y compromisos del equipo contribuyen a que la calidad de los contenidos generados potencie la imagen del medio. Y muchas veces las ideas surgen de los miembros mismos del colectivo: si hay un tema que está en la agenda de El Toque, diseñan contenido que pueda interesar a las entidades comprometidas con la temática, por ejemplo, con empresas con responsabilidad social que estén interesadas en contenidos de reciclaje. De esta manera, se cuidan los contenidos hacia un lado y el otro del proyecto. “Nuestra agenda no se ha visto afectada por demandas o pedidos de ningún cliente”, asegura Jasán Nieves.

Gutiérrez Valdizán cuenta que Ocote también tiene una estrategia para mantener la transparencia y las prioridades en la línea editorial. Primero, siempre trabajan con un disclaimer en los presupuestos que elaboran: “tenemos un párrafo que más o menos dice que al contratar los servicios de Agencia Ocote no hay ningún tipo de injerencia ni decisión en el medio de comunicación”, explica. De esta forma marcan una línea entre un proyecto y el otro. Además, tienen lineamientos internos claros: no prestan servicios al gobierno o entidades del gobierno, sobre todo para que no haya un cruce de fuentes en sus investigaciones. Tampoco lo hacen con empresas que dañen al ambiente, o que de alguna manera perjudiquen una causa que importa a la línea editorial del medio.


Imagen de Marvin Meyer en Unsplash.

ijnet.org

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