Periodistas de todo el mundo se han enfrentado a otro año de desafíos a la hora de informar sobre los problemas acuciantes de la actualidad. Con el mundo todavía navegando por la pandemia de COVID-19, han cubierto las variantes del virus y verificado desinformación en torno a las vacunas. También han mantenido a los lectores informados sobre crisis como la insurrección del 6 de enero en Estados Unidos y el regreso de los talibanes a Afganistán, en un contexto de escalada de medidas represivas contra la libertad de prensa, desde Bielorrusia y Myanmar a Nicaragua y Hong Kong.
En un 2021 agitado, los periodistas han innovado y descubierto métodos novedosos para mejorar su cobertura y relacionarse más eficazmente con las audiencias,
Hablamos con los actuales becarios Knight del Centro Internacional para Periodistas (ICFJ) sobre lo que les ha enseñado este año y qué consejos tienen para sus colegas profesionales de cara al 2022.
Latinoamérica
Sabemos que el desarrollo de audiencias requiere de trabajo en equipo; no puede ser un proyecto de una sola persona. En Salud Con Lupa hemos trabajado en múltiples proyectos para escuchar y prestar atención a las necesidades de los diferentes grupos de nuestra comunidad:
Transformemos la forma de hacer periodismo sanitario. Nuestro trabajo tiene que ayudar a los miembros de nuestra audiencia a entender sus problemas y, al mismo tiempo, a resolverlos. Por ejemplo, nuestro sitio puede presentar una investigación que exponga la corrupción entre los funcionarios de la sanidad pública y, al mismo tiempo, destacar el relato de primera mano de alguien que ha sufrido un ataque de pánico. Aunque los temas que cubrimos pueden ser diversos, todo nuestro contenido se basa en dos cosas: desmitifica la salud y la ciencia, y es un contenido con el que nuestra audiencia puede relacionarse.
Invirtamos en la salud mental de nuestro equipo. El estrés, la ansiedad, la depresión, los trastornos del sueño y de alimentación, sumados al agotamiento, son solo algunos de los problemas de salud mental que sufren a diario muchos periodistas que cubren la pandemia. La crisis sanitaria ha sometido a los trabajadores de los medios a una tensión sin precedentes, poniendo a prueba sus condiciones psicosociales y la capacidad de los editores y directores para identificar y apoyarlos.
Nigeria
Contar con información confiable en momentos en que el mundo navega por la pandemia del COVID-19 y el aumento del autoritarismo son cuestiones importantes que los medios de comunicación deben reconocer en 2022. Mi consejo para los verificadores de datos y los directores de medios es que experimenten con nuevos formatos para llegar a las audiencias a través de las redes sociales. Los contenidos de audio y humor en la verificación y la alfabetización mediática son formas óptimas para llegar a una gran audiencia. Para combatir la desinformación en el futuro, es necesario tener en cuenta los matices locales y los patrones de consumo de noticias propios de cada contexto cultural. A esto se añade la necesidad de dar prioridad a las soluciones no tecnológicas para llegar a las audiencias más postergadas.
Con los preparativos para las elecciones en curso en países como Brasil, Nigeria, Kenia y Filipinas, el desarrollo de habilidades para investigar plataformas digitales es vital para los periodistas en 2022. Es probable que los ejemplos de propaganda computacional y campañas de desinformación a gran escala ocupen un lugar destacado en algunas de estas elecciones. La familiaridad con la inteligencia de código abierto (OSINT), un campo de investigación que utiliza información de acceso público, es fundamental para los periodistas que desean desacreditar la desinformación en torno a las elecciones en estos países.
Brasil
El periodismo necesita innovación y la necesita rápido. Mientras las plataformas de redes sociales avanzan hacia nuevos productos y formatos para dominar el mundo de los contenidos, el periodismo sigue atado a las mismas viejas recetas: bloques de texto, galerías de fotos, ediciones impresas.
Estas recetas funcionan bien y son eficaces a la hora de ofrecer información compleja a audiencias muy comprometidas. Pero todavía no encontramos una mejor forma de ofrecer noticias a las audiencias más jóvenes y no hemos creado un enfoque mejor para los productos digitales.
Desde mi experiencia, he aquí algunas áreas que podrían poner al periodismo a la altura de los competidores tecnológicos:
Medio Oriente y Norte de África
La libertad y la independencia de los medios de comunicación se enfrentan a amenazas crecientes y a retos sin precedentes en todo el mundo. Las múltiples y rápidas transformaciones que han surgido en nuestras sociedades —al menos en los dos últimos años— me permiten afirmar con seguridad que nuestro papel como periodistas es seguir el camino del cambio e intentar hacer todo lo posible para que nuestro trabajo sea una virtud, no un vicio.
Mi consejo para los periodistas de 2022 es que empiecen a innovar lo antes posible. Para mí, fundar una incubadora de nuevos medios durante la pandemia no fue una decisión fácil. Sin embargo, mi fuerza motriz fue proteger la profesión en la región estableciendo un ecosistema de medios de comunicación que apoye a las jóvenes periodistas para que encuentren nuevas formas y soluciones para lanzar sus proyectos. Este año he aprendido mucho y me he dado cuenta de la necesidad crucial de investigar más sobre el periodismo en la región árabe, si queremos salvar los medios existentes y apoyar a los nuevos.
Dicho esto, creo que en un mundo que se ha convertido en virtual, con los retos existentes y emergentes a los que se enfrenta el periodismo, la desigualdad de género y el desempleo entre los jóvenes profesionales, es preciso crear nuevas soluciones.
El futuro no está lejos. Por eso la innovación y la digitalización ya no son un lujo.
Foto de Rina Filatova en Unsplash.
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